En un ambiente de compañerismo y alegría la pasada tarde del 26 de febrero de 2015, los Antiguos Alumnos del Colegio Maravillas quisimos rendir un merecido homenaje a dos de los profesores que han marcado nuestras trayectorias como alumnos: Melchor y Benito. Más de cien personas, entre antiguos alumnos, profesores jubilados y profesores en activo, nos reunimos para compartir recuerdos, ponernos al día de nuestras vidas y arropar con nuestro aplauso a los homenajeados.

El Presidente de nuestra Asociación abrió el acto, subrayando el papel de todos los profesores del Colegio, su implicación con los alumnos y su protagonismo en la formación de todos los chicos que pasaron por sus aulas. No dejó pasar la ocasión para recordar la importante labor que desarrolla la Asociación como vertebradora de las relaciones de los antiguos alumnos y como acogedora de los alumnos finalistas del Colegio. Por supuesto, invitó a todos los antiguos alumnos a que se asociaran para que sea posible la continuidad de la Asociación. Rafa Montejo, Vicepresidente de la Asociación de Antiguos Alumnos, fue el encargado en esta ocasión de decir unas palabras de agradecimiento a Benito. Recordó que fue su promoción, la del 88-89, al primer curso que Benito impartió clase, tras su etapa en el Colegio de La Salle-Griñón. Anécdotas, recuerdos, mensajes recibidos de alumnos ausentes, terminaron con la entrega de una placa de agradecimiento. Benito, visiblemente emocionado, agradeció las palabras, la placa y el acto recordando la singularidad e importancia de cada uno de los alumnos que han pasado por sus clases y se dirigió a los profesores presentes en el acto para compartir con ellos este reconocimiento.

Y para homenajear a Melchor, Carlos Colomina, ex-alumno asociado de la promoción 2013-2014 y actualmente estudiante de medicina, preparó un emotivo discurso en el que agradecía a Melchor, y al resto de profesores que pasaron por su etapa escolar, su cercanía, y su paciencia, en clase, en los viajes de fin de curso y en la preparación del Festival de Bachillerato o del Camino de Santiago. Le hizo entrega también de una placa conmemorativa que Melchor recibió agradecido. Melchor, con su sentido del humor habitual, agradeció las palabras y narró su experiencia como profesor de Maravillas todos estos años. Además nos contó varias narraciones para representar todo lo que ha recibido durante estos años como profesor, y nos queremos quedar con su cuento de la paloma, en el que vino a decirnos que nuestro futuro está en nuestras manos y de nosotros depende lo que pase. Tras las fotos de rigor, todos, profesores y alumnos, pasamos a compartir un coctel en el que seguimos compartiendo momentos, recuerdos, ilusiones y planes de futuro.